Unidad de Investigación
La ex primera dama Nadine Heredia actuó como una “funcionaria pública de facto” durante el mandato de su esposo, Ollanta Humala, para favorecer a la empresa Odebrecht en la adjudicación del proyecto del gasoducto sur peruano (GSP). Así lo aseguró la fiscal Geovana Mori, integrante del equipo especial Lava Jato, en la disposición fiscal de formalización y continuación de la investigación preparatoria a Heredia y otros exfuncionarios.
Para sustentar esa afirmación, la fiscal Mori cuenta, entre otras pruebas, con el testimonio de un personaje clave en el caso: el exjefe de proyecto del GSP Luis Sánchez Torino, a quien imputa los presuntos delitos de asociación ilícita para delinquir y colusión agravada.
Sánchez declaró ante la fiscalía el 24 de noviembre del 2016, el 5 de marzo del 2018 y el 17 de junio del 2019. Señaló, entre otros detalles, que Heredia participó en una reunión de coordinación sobre el proyecto GSP, convocada por el entonces presidente Humala a fines del 2013.
En la reunión estuvieron, de acuerdo con el testimonio, dos representantes de la consultora Wood Mackenzie, Nadine Heredia y los miembros del Comité de Pro Seguridad Energética Guillermo Lecarnaqué, Gustavo Navarro Valdivia y Rosa Ortiz Ríos.
Sánchez confirmó a El Comercio esa versión y aseguró que está dispuesto a seguir colaborando con la justicia.
“Declaré en una de mis testimoniales que hubo varios presentes, entre ellos estuvo la señora [Heredia]. Sé que estuvo presente, pero no recuerdo más [...] Yo era jefe de proyecto y cumplía funciones técnicas”, dijo.
De acuerdo con la fiscalía, el proyecto estaba direccionado a favor de Odebrecht por disposición de “las altas esferas, como de la primera dama Nadine Heredia”.
La investigación preparatoria de la fiscal Mori imputa a Heredia los presuntos delitos de asociación ilícita para delinquir y colusión agravada, y la identifica como “funcionaria pública de facto y/o de hecho por delegación de funciones de parte de su cónyuge, Ollanta Humala Tasso”.